Cualquiera que sea o haya sido padre, sabe que todos los bebes y los niños pequeños sufren caídas muy frecuentemente, mientras juegan o realizan algún deporte, por mucho que se les preste la mayor atención posible. Los niños pequeños tiene una energía inagotable, donde la necesidad de aprender y la curiosidad cobran vital importancia, por lo que casi a diario sufren algún golpe o caída aparatosa. Uno de los problemas derivados de estas caídas recurrentes son los golpes en la boca y en las piezas dentales, sobre todo cuando son bebes y comienzan a caminar.
En estos casos los padres deben saber de ante mano como proceder, ya que aunque la mayoría de los golpes en los dientes de leche de nuestros hijos no revisten de gran importancia, en algunos casos si puede producirse un daño grave, como la fractura o caída de la pieza dental, que incluso puede afectar al posterior desarrollo de los dientes definitivos. Cuando se producen estas lesiones los padres tienen que actuar rápido y correctamente pues el objetivo es que el daño en los dientes del niño sea el menor posible.
Cuando nuestro hijo sufre un golpe grave en la boca lo primero que debe de hacerse es visitar cuanto antes al odontopediatra, intentando que esto suceda como máximo durante las 24 horas después del traumatismo. Si nuestros hijos todavía no han cumplido los 5 o 6 años de edad el problema no suele ser de mucha importancia ya que después saldrá la dentición definitiva. Sin embargo, esto no quiere decir que lo podamos dejar pasar, ya que las consecuencias pueden ir mucho mas allá de la simple estética.
A continuación explicaremos como se debe actuar y que tipo de complicaciones pueden sugerir tras un traumatismo en un diente de leche.
¿Que deben hacer los padres?
En primer lugar se debe actuar con paciencia e intentar calmar al niño que seguramente estará llorando y nervioso por el dolor producido tras el golpe. Después y tras asearnos correctamente las manos, revisaremos minuciosamente la boca del niño retirando la sangre que pueda brotar de la zona afectada y confirmar que el resto de dientes no han sufrido ningún daño.
A continuación, revisaremos si el diente o los dientes afectados están enteros y si permanecen en su posición natural. Por ultimo, acudiremos a la consulta de un odontopediatra que hará una precisa valoración de los daños en el diente, la encía, la raíz y el labio mediante varias radiografías.
Tipos de Fracturas
Según la gravedad del traumatismo en los dientes aparecerán los siguientes tipos de fracturas en las piezas de nuestros hijos:
- Rotura del diente o fractura dental: cuando los niños se caen y se golpean en la boca es fácil que sufran fracturas en sus dientes, pero dependiendo de la gravedad tendrán un tipo de tratamiento u otro.Cuando las fracturas son leves el odontopediatra solo tendrá que limar los bordes afilados que hayan quedado en el dientes, para de este modo evitar que el niño se corte la lengua o los labios cuando hable o mastique.Por otra parte si el traumatismo es de carácter grave, es decir, se ha perdido parte del diente. Los padres deberán buscar la parte del diente desprendía y meterla en un recipiente con leche que evitara la deshidratacción de este, y por ultimo, acudir al dentista que pegara el trozo del diente con distintos adhesivos.
- Luxación o aflojamiento del diente: existen dos tipos de luxaciones en el diente las de extrusión (cuando el diente se mueve lateralmente) y la de intrusión (cuando este se ha movido hacia dentro). En primer lugar y con mucha sutileza, los padres intentaran recolocar el diente en su posición original (siempre con las manos bien limpias) y que el niño muerda una gasa, ya que de este modo apretara el diente sin moverlo de su sitio.A continuación, visitar con la mayor brevedad posible al dentista, quien lo sujetara de forma definitiva y comprobara si pudo haber algún otro tipo de lesión en la boca del niño, como pueden ser heridas en la lengua, labios o incluso fracturas oseas.
Dieta a seguir del niño
Durante las posteriores 2 semanas tras el traumatismo en los dientes del niño. Estos deben seguir una dieta blanda compuesta básicamente de leche, zumo, puré, sopa y batidos , ya que de este manera no afectara a la recuperación del diente, se recomienda que no se utilice el chupete. Además, cuando se laven los dientes lo deben hacer con un cepillo suave y aplicando Clorhexidina con una gasa mojada en la zona afectada, al menos durante la primera semana.
Otras consideraciones a tener en cuenta
La posterior evolución en los dientes afectados tras un golpe de este tipo, ha de ser vigilada durante los próximos 5 o 6 años, ya que se puede haber producido algún tipo de desplazamiento difícil de percibir, y que puede traer consecuencias `posteriores en la boca de los niños.
Los traumatismos a veces pueden tener consecuencias a largo plazo incluso después de muchos años.