La anestesia en la odontopediatría

Muchos padres cuando acuden nuestra clínica nos preguntan sus dudas sobre el uso de la anestesia en los más pequeños. Esta es una de sus principales preocupaciones cuando el niño debe someterse a algún tratamiento dental.

En casi todos los tratamientos se utiliza la anestesia local

Normalmente, cualquier procedimiento odontológico necesita anestesia local para evitar que el paciente sienta el dolor que pueden producir algunos de los tratamientos que realizamos en dientes o encías, ya sea un adulto o un niño.

Por ello, cuando acuden padres acompañados de sus hijos a nuestra Clínica Praxis Dental, nos encargamos de explicarles todo lo que necesiten, y por supuesto, cómo se realiza la anestesia local en edades infantiles. Este es un proceso que adaptamos al organismo del niño, para evitar el propio dolor que puede sufrir pero sin hacer ni provocar que pueda tener efectos secundarios en su cuerpo. Además, le explicaremos al pequeño sobre la sensación que tendrá en su boca tras la anestesia, ya que es algo que puede que no haya experimentado nunca.

Los niños, al igual que los adultos, experimentan la misma sensación de dolor tratamientos odontológicos, por ello es imposible someter a un niño a un tratamiento sin anestesia. La cantidad de esta última variará en función del peso del niño y su edad, por lo que la dosis no tiene nada que ver con la que se le puede llegar a administrar a un adulto.

La sedación infantil es algo normal, debido a que los niños se someten en numerosas ocasiones a intervenciones odontopediátricas como los empastes dentales para poner fin a sus caries. Estas por tanto necesitan anestesia local.

Dejando a un lado el miedo al dentista

Cuantas menos molestias y menos dolor tengan los niños en el tratamiento, menos rechazo y miedo mostrarán al tener que volver a la consulta. A través de un uso adecuado de la anestesia local en los niños, conseguiremos que sea una experiencia agradable y así reducimos la posibilidad de problemas de ansiedad en tratamientos posteriores.

Nuestra Clínica Praxis Dental, está especializada en el cuidado dental de niños y adolescentes, por lo que dominamos a la perfección la dosis de anestesia que deben recibir nuestros pacientes para que puedan recibir los tratamientos que les sean necesarios de manera indolora.

 

La gingivitis infantil

El sangrado de las encías tanto en niños como adultos es un alarmante de que el tejido de soporte de los dientes está dañándose.

La principal causa de la aparición de problemas en las encías o gingivitis en los niños es debido a la acumulación de placa bacteriana en dientes, o en las propias encías por una mala higiene dental. Si esta no se elimina se produce una inflamación y por consecuencia, se retraen. Por ello es muy importante que los niños cuiden su boca y tengan unos hábitos adecuados en su higiene dental. Este es un problema muy común, sobre todo en niños mayores de 7 años de edad. Es importante también vigilar su higiene dental cuando los pequeños entran en la pre adolescencia, ya que los cambios hormonales aumentan la circulación sanguínea facilitando por tanto la inflamación de las encías.

¿Cuáles son los síntomas de la gingivitis infantil?

Este problema se presenta cuando se produce:

  • Inflamación y enrojecimiento de las encías
  • Dolor en los dientes
  • Sangrado al comer o cepillarse los dientes
  • Sensación de que las encías se mueven y los dientes se separan
  • Alitosis
  • Abcesos en las encías, en los casos más graves

¿Qué es la gingivitis herpética?

 

Esta tipología de gingivitis aparece en bebes mayores de seis meses y se trata de una infección viral. En su boca aparecen llagas, y al igual que en la gingivitis simple, sus encías se inflaman, se enrojecen e incluso sangran. Además, este problema les puede producir fiebre, dolor de garganta, problemas al tragar e incluso inflamación en los ganglios del cuello.

Esta gingivitis se trata con un antiséptico y un anestésico tópico para ayudar a calmar el dolor, además su pediatra puede prescribirle un antivírico oral para la propagación del virus. Con un adecuado tratamiento, la fiebre podría ceder en una semana, y las llagas se curarían en aproximadamente dos semanas.

¿Cómo prevenir la gingivitis en los niños?

 

Es necesario que los padres vigilen y enseñen a sus hijos buenos hábitos de higiene bucal, para ello deben llevarlos periódicamente a revisiones odontológicas desde su nacimiento. Existen diferentes elementos como cepillos, vasos y dentífricos diseñados especialmente para atraer a los más pequeños, y así, de manera divertida lavarse los dientes les pueda resultar incluso un juego.

En Praxis Dental le enseñaremos diferentes técnicas de cepillado y cuáles son los dentífricos adecuados para la correcta salud bucal del niño. Además de revisar toda su boca y aconsejarle los tratamientos más adecuados para darle solución a este problema.

¿Qué es el bruxismo infantil?

El movimiento involuntario de apretar o rechinar los dientes, denominado bruxismo, puede causar deterioro en los dientes o que estos se vuelvan mucho más sensibles a alimentos fríos. En adultos está relacionado con el estrés o la ansiedad, lo que a algunas personas les lleva a padecer dolores de cabeza o incluso contracturas musculares. Es un problema que sobre todo suele darse durante la noche, cuando estamos durmiendo, por lo que es muy difícil de controlar.

En los más pequeños este problema aparece de dos formas diferentes, el bruxismo céntrico (apretando la mandíbula) y excéntrico (frotar o rechinar los dientes), además de que en ellos aparece indistintamente, tanto por la noche como por la mañana.

En el caso del bruxismo diurno los niños tienden más a apretar la mandíbula que a rechinar los propios dientes, mientras que en el caso del bruxismo nocturno puede ocurrir de las dos formas.

El origen de este problema suele tener diferentes causas, tanto físicas como psicológicas que desarrollaremos a continuación.

Causas del bruxismo infantil

 

Cuando nos referimos a cuestiones psicológicas, hablamos de alteraciones o trastornos infantiles que pueden llevar a los niños a situaciones de estrés o aumento de la tensión emocional, como puede ser la hiperactividad infantil, lo cual al descansar en las horas de sueño, ese problema se desarrolla y aparece reflejado en apretar y rechinar los dientes.

Otros factores físicos que pueden hacer que aparezca este problema son la cefalea, dolores de cabeza o dolor de oídos. También cuando aparecen los dientes definitivos, hacen que la boca tome una nueva estructura, e incluso la incorrecta posición de estas piezas finales pueden interferir en la manera de cerrar la boca del niño.

Aparte de este tipo de causas, que son las más comunes, algunos bruxismos en niños están asociados a parásitos intestinales, por lo que hacen que el pequeño esté intranquilo, y descargue la tensión que tiene en su boca.

Si tu hijo padece de alguna de las variaciones de este problema, te aconsejamos que acudas a nuestra clínica Praxis Dental y nosotros le pondremos solución. Los dientes de ahora, son las sonrisas del futuro.

 

¿Por qué debemos evitar que los niños se chupen el dedo?

Algunos bebes y niños tienen el hábito de chuparse el dedo en sus primeros años de vida, pero esto no debe prolongarse en el tiempo, ya que puede ocasionar diferentes problemas y complicaciones en su salud dental. Por ello, es muy importante que los padres se mantengan atentos a este hecho e intenten corregirlo y ponerle fin antes de que sea demasiado tarde.

La succión es un reflejo del bebe desde mucho antes de nacer. Además de provenir por una función nutritiva, a algunos niños les proporciona seguridad, tranquilidad o incluso placer.

La primera forma de evitar que esto ocurra es a través de la utilización del chupete cuando todavía son muy pequeños, ya que esto cumplirá las mismas funciones, pero debemos mantenernos al tanto y empezar a quitárselo con el paso del tiempo.

Casi todos los niños chupan sus dedos, o el chupete, durante el primer año de vida, con la aparición de los primeros dientes. Esto les dará una cierta tranquilidad al dolor que les produce su crecimiento. Deberán dejar de hacerlo al llegar a los dos años de vida, aunque algunos niños siguen metiendo el dedo en su boca hasta incluso los seis años.

Este hábito debemos hacer que desaparezca debido a que puede hacer que aparezcan problemas dentales, maxilofaciales e incluso en el lenguaje, sobre todo si su pequeño lo sigue haciendo más allá del tiempo mencionado anteriormente.

Algunos de los problemas más comunes que puede ocasionarle son:

  • Cambio en la orientación de las arcadas dentarias: la arcada superior se desplaza hacia delante, y la inferior hacia detrás.
  • Maloclusión dental: esto puede provocar una mordida abierta o anterior, debido a la falta de contacto entre los dientes incisivos superiores y los inferiores al morder.
  • Deformación del paladar: la succión del dedo produje un empuje en dirección ascendente, por lo que el paladar cambia de forma convirtiéndose en convexo, o lo que es llamado paladar ojival.
  • Hipoplasia o insuficiente desarrollo del maxilar superior: la posición de la lengua que se produce por la succión del dedo deriva en que el maxilar superior no se desarrolle al mismo ritmo que el resto.
  • Alteraciones en el lenguaje: debido a la transformación de la situación original de los dientes, la lengua y el propio paladar, los cuales son elementos muy importantes en la fonación o pronunciación de determinados fonemas, puede verse alterada la pronunciación de la /t/, /d/ y /l/, lo que da lugar a dislalias, ceceo y seseo en su vocabulario.

Si tu hijo tiene uno de los anteriores problemas lo mejor que puedes hacer para ponerle solución, es acudir a nuestra clínica Praxis Dental y nosotros lo corregiremos y haremos que tu hijo pueda sonreír más que nunca.

Tipos de ortodoncia en los niños

La ortodoncia es la especialidad de la odontología encargada de corregir las oclusiones dentales en niños y adultos. Lo que es lo mismo, corrige los dientes que están mal situados o colocados, haciendo que estos queden más alineados y bonitos.

Los resultados de la ortodoncia son más efectivos durante la infancia, ya que es más fácil corregir los defectos óseos y las malposiciones dentales en los niños, así conseguirá lucir una preciosa sonrisa en su etapa adulta.

Es aconsejable que la primera revisión de un ortodoncista a la boca de su hijo se realice a los 7 u 8 años, ya que en ese momento ya han erupcionado los incisivos superiores e inferiores definitivos. A esta edad el crecimiento óseo además, nos permitirá diagnosticar si existe algún problema que se pueda solucionar de forma rápida. Si la boca de su hijo se encuentra en correcto estado, se harán revisiones anuales para controlar la correcta erupción dental. Al acudir a un especialista en odontología infantil, este será quien les avise si es necesaria la visita al ortodoncista antes de lo habitual, debido a que exista algún problema.

 

Tipos de aparatos:

 

Removibles: Se trata de unos aparatos de acrílico, que por medios de unos ganchos metálicos se aguantan en los molares. Sirven para corregir defectos óseos, aprovechando el crecimiento. Su uso condiciona los resultados del tratamiento, por lo que cuantas más horas se lleva puesto, más rápida y evidente será la corrección. Estos aparatos necesitan un mínimo de horas de utilización, por lo que, es preciso llevarlo puesto toda la noche y unas 4 o 6 horas durante el resto del día.

Fijos: En este caso hablamos de los brackets, aparatos que van pegados a los dientes. También hay otro tipo de aparatos fijos complementarios no necesarios en todos los casos. Con los brackets, se controla la posición exacta de cada diente, lo que sirve para conseguir una oclusión perfecta. Además, se puede elegir el tipo de material, ya sea de metal o porcelana estos últimos utilizados cada vez más por su estética.

El tratamiento con estos tipos de aparatos se puede iniciar con 7 años en los removibles, pero sin embargo, para los aparatos fijos deberemos retrasarlo hasta que el pequeño haya cambiado todos los dientes temporales por los definitivos.

Para utilizar estos aparatos, el niño debe extremar sus medidas de higiene, sobre todo en los aparatos fijos, ya que se retiene muchos más restos de comida y placa que en los removibles. Por ello se aconseja siempre el cepillado después de comer. En el caso de los aparatos removibles, se aconseja cepillarlo antes de colocarlo y al retirarlo, con agua y jabón neutro para poder conservarlo y guardarlo limpio.

¿Por qué es importante visitar regularmente al dentista?

Es importante acudir con regularidad al dentista para que podamos ayudar a mantener los dientes y encías de sus hijos saludables. Además debe visitar nuestra consulta al menos una vez cada seis meses.

 

¿Qué ocurre en la visita a Praxis Dental?

 

Las visitas, salvo que tenga un mayor problema en su boca, se tratarán de revisiones.

Revisaremos su dentadura para comprobar si existieran caries y ver si hay placa bateriana o sarro sobre los dientes. La placa bacteriana es una película clara y adhesiva que contiene bacterias. Si esta no se elimina puede endurecerse y convertirse en sarro. Además, el sarro no se elimina con el cepillado y el uso de seda dental. Si no que cuando se acumulan placa bacteriana y sarro sobre sus dientes, esto puede dar lugar a la aparición de diferentes enfermedades buco-dentales.

Después, revisaremos sus encías. Esto lo haremos con una herramienta especial para medir los espacios existentes entre las encías y los dientes. Las encías sanas presentan espacios de poca profundidad. Cuando se padece gingivitis, los espacios pueden ser mucho más profundos.

La revisión también incluirá mirar la lengua, garganta, rostro, cabella y cuello, con el fin de identificar cualquier síntoma de problemas como inflamaciones o infecciones bucales.

Por tanto entre las visitas al dentista hay que asegurarse de cuidar bien los dientes y encías. La placa dental se acumula continuamente sobre los dientes, pero podrán eliminarla mediante el cepillado diario y el uso regular de la seda dental.

 

Tres pasos a seguir para una correcta higiene dental

 

  1. Deberá cepillarlos al menos dos veces al día, empleando una pasta dental que contenga flúor.
  2. Usará la seda dental al menos una vez al día.
  3. Enjuagará su boca para contribuir a eliminar la placa bacteriana, además le ayudará a mantener un aliento fresco.

¿Qué es la odontopediatría?

Aunque muchas personas desconocen este término, se trata de la rama de la odontología encargada de tratar a los niños. Su principal diferencia con los odontólogos generalistas es que los odontopediatras son profesionales que han seguido una formación postrgraduada y especializada, que les capacita para ofrecer los cuidados orales y tratamientos del colectivo infantil desde su nacimiento hasta que cumplen los 18 años, incluyendo a los niños con necesidades especiales.

La base fundamental de un dentista infantil es educar a los niños a cuidar su salud dental para prevenir problemas como la caries, que suele ser el más común en edades tempranas.

Además, es importante para la salud dental de un niño que sus padres le presten especial atención a su boca y acudan pronto al odontopediatra para prevenir futuros problemas. En algunos casos, si fuese preciso,  podría derivar al niño al ortodoncista para prevenir maloclusiones dentales (mal alineamiento de los dientes).

 

Es importante acudir a un especialista

 

Cuando se acude a las revisiones con el pediatra, este le suele realizar una exploración de la boca, pero no obstante, desde Praxis Dental aconsejamos llevar a vuestro hijo a un odontopediatra especializado.

Además, es recomendable hacerlo a partir del primer año de vida, pues esto le ayuda a familiarizarse con el entorno de una clínica dental, ya que muchas personas adultas desarrollan miedo hacia las mismas por acudir con poca asiduidad y salvo con problemas dentales graves.

Los dentistas infantiles nos encargamos de diferentes problemas relacionados con la dentición de los más pequeños, que en algunos casos pueden aparecer durante la infancia o ser de origen congénito.

 

Principales problemas dentales en niños

 

    • Caries: Además de tratarlas adecuadamente y evitar sus posibles complicaciones, es muy importante adoptar las medidas preventivas para evitarlas, incluyendo la identificación de factores que puedan favorecer su aparición, sellado de fisuras, o la educación en relación a la nutrición y la higiene dental para evitar que vuelvan a.

 

    • Traumatismos: Es muy habitual que los niños sufran diferentes caídas o golpes que les provoquen la rotura o perdida completa de alguna pieza dental, lo que implica su restauración y hasta la reimplantación del propio diente.

 

    • Alteraciones en la posición de los dientes y maloclusiones: Exploraremos los dientes y maxilares del niño para detectar posibles alteraciones en la mordida que impliquen un tratamiento especial ortodóncico. Es muy importante que cuando se presente la perdida de alguna pieza dental temporal se trate en el menor tiempo posible para proceder al uso de mantenedores de espacio para así conseguir que otros dientes no ocupen espacio del que se ha perdido y no derive en problemas dentales posteriores.

 

    • Anquilosis de la pieza temporal: Tras sufrir un traumatismo, un diente puede volverse negro y provocar la necrosis de la pulpa, lo que puede ocasionar en algunas ocasiones que el diente definitivo no pueda erupcionar.

 

  • Alteraciones congénitas: Estas pueden afectar al número, tamaño y forma de los dientes, de tal forma que puede presentarse de diferentes formas: anodoncia (no sale la primera dentición), ablastodoncia (no salen los dientes definitivos), más dientes de los debido, y que el tamaño de los dientes sea superior o inferior al normal.

 

Durante su primera visita a Praxis Dental se les realizará una primera revisión de la boca de su hijo y se le facilitarán diferentes consejos sobre higiene, hábitos alimenticios saludables, tras una evaluación y diagnóstico inicial del niño.